El Diario de Navidad o December Daily es conocido en el mundo del scrap como el miniálbum por excelencia. Quién se anima a hacer minis no puede dejar pasar estas fechas llenas de amor, felicidad, y cariño sin documentar.
Pero las Navidades no siempre son una época feliz y digna de recordar. El año pasado fueron las más tristes de mi vida y la verdad, el diario se quedó en nada, papeles, alguna foto del comienzo de las mismas y poco más. Tristeza mezclada con regalos, Olentzero, cabalgatas, luces e ilusión infantil.
Osaba Pedro falleció el día de Reyes dejando en mi hija de cinco años una tristeza infinita y una mala leche y falta de confianza total en los Reyes Magos, a los que pidió que su osaba se pusiera bueno.
Hoy a casi un año de distancia, me animo a contarlo y a retomar la Navidad, para que mi pequeña la viva como debe, como niña. Por eso me animo a documentar las Navidades 2016. Por Maddi. (Y por Pedro, al que echaremos mucho en falta).
Y para no echarme atrás con las intenciones, no hay nada como hacerlo público...
Hoy os dejo la portada del Diario, realizado a partir de una carpeta de cuatro anillas que llevaba esperando para ser usada la friolera de 7 u 8 años.
Espero que os guste. Pronto las primeras páginas de Diciembre.
